Es durísimo estar pasando por una crisis matrimonial. Nadie está preparado para saber cómo evitar el divorcio. Jamás nos imaginábamos que amar dolería tanto, lo sé, conozco perfectamente ese dolor. Y a veces, aunque tengas amigas, amigos y familiares que quiera apoyarte, sus palabras te dan poco consuelo. No les culpes. No han pasado por el dolor de ver su matrimonio a punto de separarse y con sus buenas palabras te intentan animar. Lo hacen desde el amor, lo hacen porque te ven sufrir pero incluso queriéndote un montón y queriendo lo mejor para tí, no siempre pueden tener la empatía que necesitas, porque no entienden tu dolor.
La gente te dirá: «Déjalo, no mereces sufrir por un hombre así». «Olvídate de él, es una mala persona, ¿cómo te va a hacer esto a ti?» «Cuanto antes lo olvides, antes vas a rehacer tu vida».
Tienen buenas intenciones, sí. ¿Pero y lo que tú sientes? ¿Y lo que tú quieres? ¿Y lo que tú necesitas? No se dan cuenta que no importa si lo mereces o no lo mereces, lo que importa es que es tu marido, vivieron muchos años felices y estas convencida que pueden seguir siendo felices. Lo que importa es que para ti, él no es un mal tipo, y que no quieres olvidarlo y mucho menos pensar en rehacer tu vida!!! De solo pensar eso se te da vuelta el estómago!!
A lo largo de los últimos años, después de pasar por nuestra propia crisis, y formarme en coaching ontológico e inteligencia emocional, trabajo salvando matrimonios. Porque para mí no es concebible que una persona que te ama durante 20 años pueda dejar de amar así sin más. ¡¡A mí no me cabía en la cabeza!! Y busqué comprender a mi esposo y comprender la situación de crisis personal que estaba viviendo. Elegí no quedarme en el papel de víctima, de mujer engañada, de pobrecita, sino que busqué entender, ¿qué pasa? ¿por qué está pasando esto?
Y necesite ponerme en la piel de mi esposo, para reconocer mis errores, para reconocer las piedras que yo misma estaba poniendo en nuestro matrimonio. Necesité comprender qué pasa por la cabeza de un hombre a los 40, cuando siente que o hace su vida ahora o ya está todo perdido. ¿Qué es lo que se perdía si no lo hacía ahora? ¿Qué es lo que sentía que no podía hacer al lado mío? ¿Cómo podía mostrarle yo que SI PODÍA VIVIR Y SER FELIZ sin necesidad de separarnos, sin necesidad de que nuestros hijos sufrieran por la ruptura de su familia?
En aquellos momentos de crisis de pareja escuché mil veces que lo dejará, que me rindiera, que yo no me merecía esto. Pero mi corazón me pedía que luchara, todo mi ser quería entender y llegar a recuperar la relación. Hice de todo. Incluso que me tiraran las cartas cuando yo JAMAS en mi vida creí en eso!!! Pero yo sabía cómo me amaba mi esposo, sabía que con la persona con la que estaba se iba a arruinar la vida. Y LUCHE. LUCHE MUCHOS MESES, hasta que cuando parecía que todo se iba a acabar, que ya me dejaba para siempre, con los papeles del divorcio en la mano, con todo preparado para la mudanza, con nuestros tres hijos al corriente de la situación, cuando más negro estaba, todo lo que yo había luchado, aprendido y sembrado, dio frutos. En lugar de dejarme a mi, ese día la dejó a ella y nuestro matrimonio tuvo la oportunidad de recuperarse.
Desde hace más de 6 años hemos repetido esta historia muchas veces. Con muchas mujeres con las que he trabajado como coach durante sus crisis de pareja, por la crisis de los 40 Y aunque no en todas las veces fue posible evitar la ruptura, te aseguro que vale la pena intentarlo. Bueno, en realidad si vale la pena invertir en recuperar a tu esposo, eso solo tú puedes saberlo. Solo tú puedes decidir con firmeza si vale la pena intentarlo, porque tú eres quien conoce a tu esposo, y si ha sido un buen hombre, un buen compañero de vida, si ha habido amor y respeto… vale la pena si ha sido así.
Internet, el mail, nos permiten trabajar en recuperar tu matrimonio sin importar en qué país te encuentres. Nos da la posibilidad de apoyaremos en audios, textos, libros, videos. Hay mucho que comprender. Y por lo general no hay tiempo que perder. Por eso intento que sea un trabajo intenso, no una sesión de 60 minutos una vez por semana, sino que cuentes conmigo durante todos los días, escribiéndome, leyendo el material, haciéndome preguntas, contándome tu situación, para que podamos entre las dos entender qué está sucediendo con mayor claridad y así poder recuperar a tu esposo.
Para empezar es necesario completar dos archivos, que envío a cada persona una vez nos hemos puesto de acuerdo en comenzar a trabajar en recuperar la relación. Un cuestionario con algunas preguntas para que me cuentes un poco más sobre ustedes. Un test de escucha activa para empezar a trabajar en los puntos mejorables Para comprenderse, el primer paso es saber escuchar, por eso empezamos por ahí.
No hay nada que de más satisfacción, para mi, que pensar en los niños y niñas que siguen teniendo una familia unida gracias a que mis propios hijos estuvieron a punto de perder la suya. Esa satisfacción es enorme y me mueve a ser insistente a la hora de responder a los mails desesperados, porque sé que hay soluciones, porque sé que podemos intentarlo, porque sé que lo conseguimos en muchos casos y porque tu familia puede ser una más de las que siga adelante tras este bache.
Cuando yo misma estaba luchando por recuperar el amor de mi esposo también tenía dudas de si lo lograría o no. En uno de mis peores días puse en facebook que Alguien me golpeara para reaccionar y darme cuenta que todo se había acabado. Por el contrario, una amiga que había pasado por lo mismo me escribió y me dijo que ella me daba ese golpe, pero para que luchara, para que siguiera intentándolo, para que hiciera lo que me pedía el corazón. El 6 de junio del 2016 celebramos con mi esposo 29 años desde que nos pusimos de novios. Nada de esto sería posible si me hubiera rendido aquel día. El futuro no está escrito. Lo escribimos cuando tomamos decisiones y apostamos por lo que realmente queremos.
Puedes escribirme un mensaje privado desde este formulario si deseas que trabajemos juntas para recuperar a tu esposo.
Viki Morandeira
Coach Ontológico
Crisis de Pareja 
7 comentarios en “Déjalo, no mereces que te haga sufrir así.”